Y luego nos quejamos de ser la profesión peor valorada. Dejemos a un lado a la prensa del corazón, tripera (la definición es de Puri Beltrán) que me gusta más. Asumamos que no somos como ellos, que los periodistas, los de verdad, hacemos un trabajo distinto, mejor o peor, pero necesario.
Imaginemos que no buscamos el morbo ni el amarillismo.
Por concretar, hablemos sólo del periodismo que hacen los grandes diarios de referencia, las grandes radios de referencia y los servicios informativos de las cadenas de referencia. Me ha quedado larga la introducción, intentaré ser breve:
No creo que sea un gran periodista, al menos, no creo que tenga el suficiente bagaje como para presentarme a mi mismo como tal. No tengo ni la experiencia ni probablemente los conocimientos necesarios para hacer tal afirmación. Y aún así me voy a atrever a criticarnos. Una crítica más dura si cabe teniendo en cuenta que viene desde la mediocridad, o, al menos, desde un periodista medio.
Nada del otro mundo. Y nada nuevo, ciclicamente se reabre (nunca se cierra en realidad) el deabte: ¿qué es periodismo? ¿hacia dónde va? ¿es mejor o peor que antes? ¿es necesario?... En fin. Busquen por Internet.
El periodismo es más que necesario, es imprescindible. Somos necesarios señores, pero hasta que no hagamos las cosas bien nadie nos tomará en serio.
Hay ciertas cosas que no se pueden permitir, sé que errar es humano pero, ¿dejarían pasar un error de un médico así como así, por muy humano que sea? Pues eso.
No quiero que esto sea un glosario de agravios así que permítanme que me tome la licencia de no linkar ni citar expresamente a los autores de los errores, si coincide que alguno de ellos lo lee, que sepa que probablemente yo también los he cometido y son igual de imperdonables que los suyos.
-No se puede titular a toda página (web) tras un atentado: La M40 se haya cortada en este momento. A parte de lo penoso de la construcción de la frase, las hayas se cortan, sí, pero en el campo.
-No se puede conectar con tráfico a primera hora de la mañana escuchando cómo te dice que hay una gran avenida cortada por una "incidencia" y no averiguar por qué está cortada. No se puede volver a conectar media hora después y preguntarle a tráfico cómo va esa "incidencia". Primero porque es asumir un lenguaje determinado, que además está hecho para engañarnos como bobos, y segundo porque tú, periodista, ya deberías haber averiguado qué pasa. Y lo que no se puede hacer en ningún caso es conectar una tercera vez (una hora después de la primera) e informar de una noticia que se ha producido hace unos minutos: "atropello en esa tal avenida"... ¿hola? la avenida lleva cortada más de una hora. ¿Nos toman por tontos o qué?
-No se puede rotular, en una televisíón, tras un atentado de ETA sin muertos: ETA ya no tiene ni suerte, porque a los dos días, asesinan a dos Guardias Civiles y el ridiculo es de proporciones bíblicas, amén del mal gusto del rótulo independientemente de lo que pasó después.
-Tras un crimen no se puede hablar de presunto asesinato, presunto crimen, presunto muerto, presunto cadáver... Y el acabóse ya es cuando se habla del presunto acusado. Vamos a ver señores NO ES TAN DIFÍCIL. Se llama presunto (consulten la RAE) a quien se cree que puede haber cometido un crimen y se dice presunto porque no está confirmado. Ahora bien, si lo acusan, lo acusan, no es presunto, si está acusado de algo está acusado de algo, nadie te va a demandar por decir una verdad, que alguien está acusado de algo.
-Es duro pero la gente se muere. Es un verbo que existe, no hace falta que la gente fallezca, pierda la vida o se la deje, que no es un libro para olvidársela por ahí. Admito que se usen como sinónimos para no repetirse, y aún así, hay formas menos artificiales de decirlo. Los periodistas somos personas hablándole a otras personas, por favor, usemos el lenguaje de las personas, no construcciones artificiales.
-Las coletillas cansan. Carrascal no era seguido por miles de personas por sus coletillas, gustaba por su forma de hacer periodismo. Por favor jóvenes editores o presentadores con aires de grandeza, no sean ustedes cansinos y prepotentes, quiero saber las noticias, no recordarle por muletillas o coletillas. Cuando sea usted muy buenísimo podrá evangelizarme con sus frases estúpidas.
Valga con esto que es lo que se me ha ocurrido así de primeras, a botepronto.
-Sólo una más, sobre las ruedas de prensa sin preguntas, ya expuse mi posición que resumiré así: a pesar de las ruedas de prensa sin preguntas, casi siempre es posible meter el micro y preguntar, háganlo.
Y una última cosa, esta de consumo interno: No leáis los confidenciales, y si lo hacéis (yo lo hago de vez en cuando) no os los creáis.
5 comentarios:
Cuánta razón lleva usted! Muy buen post!
Enorme. Zas, en toda la boca!
Coincido en todo lo expuesto...
Aunque todos cometemos errores, actualmente se está desvirtuando tanto esta profesión que cualquiera crea que puede hacer de periodista simplemente repitiendo lugares comunes, coletillas y frases hechas, que de tanto usar, ya no significan nada...
El contenido está bien, lo que no acabo de entender es que critiques a los periodistas en un artículo con tantas faltas de ortografía...
bueno, como periodista, el post me critica a mi también, el propio post lo dice.
Lo he revisado y había un par de letras bailando y faltaba un acento, en cualquier caso, si me dices las faltas que se me hayan pasado las corregiré encantado
gracias por leerlo!
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