viernes, 27 de diciembre de 2013

Es tu (puta) culpa, desgraciao

Claro, el título es injusto, es probable que el 20N (no podíamos ni imagina entonces lo bien elegida que estaba la fecha para esas elecciones) no votaras a Mariano pero todos somos cómplices de lo que están haciendo. Vivimos aquí. En el país de Campofrío.

Pero esto no va contigo, esto va con los que sí votaron a Mariano y sus secuaces y, a más a más, con los que lo volverían a hacer. Esto es para ti, desgraciao.

Para ti, desgraciá, que estás condenada a parir un hijo con graves malformaciones, condenado a una vida de sufrimiento y dolor. Y con recochineo y burdas mentiras.

Para ti, desgraciao, que sufrirás con tu mujer viendo sufrir a tu hijo y perderás tus ahorros para paliar su sufrimiento porque la Ley de Dependencia ya ni existe. Y con recochineo.

Para vosotros, desgraciaos, que pasaréis frío todo un largo invierno porque no podréis pagar la luz.

Para vosotros, desgraciaos, que acabaréis en la calle porque no podréis pagar la hipoteca y los bancos mandan más que vosotros. Para vosotros, que iréis a pedir ayuda a vuestro ayuntamiento y os dirá que no puede hacer nada, porque ya no pintan nada.

Y cuando queráis quejaros no podréis. O sí, pero os multarán de lo lindo.

Desgraciaos, que sois unos desgraciaos, que vais a ver como vuestro hijo o hija trabaja 40 horas a la semana pero no puede irse de casa porque cobra unos míseros 645,30 euros y con eso no puede pagar un alquiler ni una casa porque, como decía, los bancos y siguen forrándose a nuestra costa.

Porque tu hijo, desgraciao, va a trabajar y aún así, va a ser pobre. El miedo a perder el trabajo como arma.

Porque vosotros, desgraciaos, os jubilaréis, y la mierda de sueldo de vuestros hijos, junto a vuestra mierda de pensión, y los achaques propio de una vida de hacer el mal convertirá vuestros últimos años de vida en un infierno de estrecheces tras una vida de trabajo.

Y yo me alegraré. Me alegraré mucho porque os lo habréis ganado, desgraciaos.

Pero estáis a tiempo. A tiempo de salir a la calle, a tiempo de protestar, de hablar con los desgraciaos que tengáis al lado, de votar otra cosa en las elecciones europeas, municipales y, en 2015, en las nacionales. A tiempo de convertir a España en un país que no dé puto asco.

Dice siempre mi suegro que no hay nada más tonto que un obrero que vota a la derecha, supongo que ese es el problema, que a muchos se os ha olvidado que sois eso, obreros, peones, curritos, trabajadores, proletarios. Es a vosotros a los que hablo.

A los que cortan la línea argumental de este artículo yendo a Londres, con un plan de pensiones privado y colocando al hijo en la empresa de un compañero de pupitre no tengo nada que decirles, salvo que a algunos no habéis podido engañarnos y seguimos creyendo que la lucha de clases existe. Hoy más que nunca.

Y ahora me gritáis, si tenéis cojones, lo de "PSOE, PP, la misma mierda es".

PD: Esto puede considerarse una segunda parte de esto. Leetelo.

Leer más


votar