La proporción lo dice todo. Son quienes acudieron al Pleno Extraordinario en Boadilla del Monte en el que dimitieron su imputado alcalde, Arturo González Panero, y su número dos, María Jesús Díaz, obligada por un pacto interno.
Creo que la respuesta, en este caso es clara, sí.
Ahora bien, la segunda reflexión es, ¿qué mas da que se informe?
De los 41.807 habitantes de Boadilla a 41.806 les importa un pito tener un alcalde presuntamente corrupto, imputado, que dimite pero sigue de concejal y que las rencillas internas le impidan ser alcaldesa a la número dos de la lista más votada (la del PP, claro).
Una pena, aunque no es nada nuevo, parece que la corrupción da votos.
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5 comentarios:
Cincuenta periodistas y un vecino. ¡Qué buen comienzo! Para el post, quiero decir. García Márquez tuvo una idea similar y le salió Cien años de soledad. No estuvo nada mal. Anímate. Bromas aparte, qué buena argumentación a tus dos preguntas. Estoy de acuerdo. ¡Claro que no les importa! Saludos.
Hombre, digo yo que alguno de los 41.806 tendría que estar trabajando a esas horas... ¿no?
migramundo hay mucho trecho entre un buen comienzo y un libraco como 100 años de soledad, aunque gracias por la comparación (aunque sea de broma). Por cierto te puedes creer que no lo he leído? lo empecé hace años pero nunca lo acabé.
Álvaro, realmente crees que aunque no hubiera estado ninguno trabajando habría ido más gente?
Si en las últimas elecciones municipales el censo de posibles votantes era de unos 25.000, 19.000 votaron al PPanero, por tanto a esas personas les importó un pito si el alcalde llevaba 10 años haciendo lo que hacía, mientras que les den de comer, puede llevarse lo que quiera. A toda la 3ª edad la tiene comprada con dos comidas al año, en la fiesta patronal y en navidades, y no una comida de tortilla y caldereta, no, no.... en un restaurante de 50€ el cubierto, El Antígüo Convento (otra posible adjudicación a investigar)... a la mano que me da de comer no se la pega.
la verdad es que es una pena eh? Es lo mismo que pasaba en Marbella, todos sabían que había corupción pero total, el pueblo estaba bonito... Aún así, asumiendo que todos sabían que era corrupto y no les importó, en un país tan proclive al espectáculo y a olvidar rápidamente las cosas, me extraña que no fuera un grupo de acólitos a defenderlo o uno de contrarios o ex-admiradores ofendidos a proferir ese insulto que tanto nos gusta: CHORIZO!!!
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